Guanaco

Guanaco en todo su esplendor
Guanaco en todo su esplendor

Del quechua wanaku, literalmente, el que tiene mala hostia. Según biólogos, ecologistas y demás amantes de este, nuestro planeta, en general y fumadores de plantas mágicas, en particular, el guanaco es una especie de animal mamífero similar a una jirafa, pero sin las manchas y las dotes musicales que dicho animal posee (para más información buscar El Rey Lechón). Se caracteriza por tener cara de llama, forma de llama, olor de llama, en resumen ser una llama, pero con un nombre mucho más gracioso.

 

A pesar de su aspecto afable y apeluchado, en el interior se esconde la mayor maquina de matar del reino animalistico. Este ser salido del averno tiene un ávido apetito de sangre, cual abogado pasado ya el crepúsculo. A pesar de no tener mas de 1,60 cm. y no pasar de los 90 Kg, un único individuo es capaz de arrasar una población de 2000 habitantes, 15 bares de carretera y 8 puticlubs en tan solo una noche.

Guasinton tras el paso de una manada de guanacos
Guasinton tras el paso de una manada de guanacos

Este espíritu asesino de los guanacos hizo que acabaran convirtiéndose en los mayores enemigos de los pueblos patagónicos precolombinos. Como atestiguan los hallazgos arqueológicos en la cuenca del río Limay, la lucha por la supremacía en el medio fue BRUTAL, llegándose al punto de la casi total extinción de las poblaciones humanoides en torno al 5.000 B.P. No fue hasta la intervención de los mapuches (híbridos entre mapache y peluche) que los guanacos se vieron obligados a retirarse a zonas más subrepticias de las estepas patagónicas.

Guanacos en pleno despiporre
Guanacos en pleno despiporre

Con la llegada de los españoles, y sus armas de destrucción masiva (el orujo, la especulación urbanística, el tomate y sus sucedáneos y sobretodo CAMELA) los guanacos vieron su situación empeorar hasta limites inimaginables siglos atrás.


Los años de ocupación española fueron terribles para este noble animal. Debido a la decadente perversión, libertinaje, desenfreno, escándalo, corrupción, depravación y vicio en general, introducido por los españoles; los actos impíos y sanguinolentos de los guanacos pasaron desapercibidos. Esto obligó a los guanacos a convertirse en animales domésticos y en algunos casos putitas de los españoles, para así, de vez en cuando, desmembrar algún que otro niño que pasara por la hacienda desprevenido.


Los guanacos apoyaron la independencia de las colonias americanas a principios del siglo XIX, poniendo su poder destructivo al servicio de los criollos, que sin su ayuda, dificilmente podrían haber vencido a los realistas españoles. Así, los batallones G (no confundir con Pipas G, con Comando G o con Mazinger Z) destacaron por su despiadada eficiencia en el campo de batalla, dejando solo un montón de vísceras humanas y excrementos de camélido allí por donde pasaban. El terror ante estas fieras fue en realidad lo que motivó al teniente coronel Rafael de Riego a amotinarse en Cbezas de San Juan, ante la perspectiva de que le enviaran a combatir tan cruel enemigo. No sabía que Fernando VII, además de ser más feo y oler peor que un  guanaco, era incluso más cabrón que estos bichos.


A lo largo del siglo XIX los guanacos fueron peones en las luchas políticas y guerras civiles que asolaron la zona. Se dice que el general argentino Juan Manuel de Rosas tenía tan mala hostia porque se crió mamando leche de guanaca (o de guanaco, las fuentes lo discuten). Este empleo indiscriminado como fuerzas de choque debilitó considerablemente la población y obligó a la especie a reintegrarse a la vida doméstica, aunque fueron frecuentes los casos de "guanacos matreros" que vagaban por las pampas en bandas de forajidos muy cabreados que arrasaban todo a su paso.

Guanaco devorando un tapir vivo
Guanaco devorando un tapir vivo

Actualmente gracias a las ayudas de PazVerde y demás ONG ecologistas, la situación de los guanacos ha mejorado en gran medida, pues ahora son una especie amparada por la ley. Esto ha inclinado la balanza a su favor de nuevo, y en los últimos años su número ha aumentado de 250.000 individuos a finales de 1985 a 10.000.000.001 en 2042. Este incremento geométrico-exponencial del número de individuos, les ha permitido abandonar la vida doméstica y volver a sus insignes orígenes homicidas; volviendo a situar a la población humanoide de la Patagonia en peligro de extinción.

 

Como podemos ver en las siguientes imágenes, los guanacos han desarrollado una cierta predilección por los turistas gringos, a los cuales atacan con ferocidad y BRUTALidad sobreanimal (tampoco se les puede reprochar, la verdad).


Posiblemente percibiendo la debilidad neuronal de su presa, se acercan utilizando su arma más mortífera, el peluchismo; haciéndose pasar por un dulce animal peludito e inofensivo hasta que se encuentra en el radio de acción oportuno para lanzarse con furia asesina sobre su presa y devorarla violentamente.

Los guanacos son los depredadores más sanguinarios de la Patagonia. Son capaces de comer hasta 6 veces su peso en carne cruda. Los ñandúes tendrán que esperar.

Albahaca momentos antes de digievolucionar a guanaco
Albahaca momentos antes de digievolucionar a guanaco

Los guanacos son la fase intermedia entre las albahacas (versión peluchística) y las llamas (versión 2.0 beta). En algunos casos se puede dar la circunstancia en la que, al igual que un alien zángano se puede convertir en reina, un guanaco puede digievolucionar a llama supersayan, sin pasar por la fase de llama común. Esto solo ocurre en casos de necesidad extrema o una suculenta oferta millonaria de Diznei.

 

Pero no solo los guanacos poseen esa necesidad instintiva de sangre y mutilación; su digievolución, las llamas, son incluso más infames. Como podemos ver en la siguiente imagen de archivo tomada durante el 11/S. No se trató de aviones, o de trenes como sugieren ciertas teorías de conspiración. Fueron las llamas, en su irrefrenable orgía de violencia las que perpetraron la tragedia.

Las Torres Mellizas pasto de las llamas
Las Torres Mellizas pasto de las llamas

En resumen y como conclusión final: Los guanacos son una obra maestra de ingeniería animal, son máquinas de matar bien engrasadas, eficaces, perfectas y letales...

 

Y están hambrientas.

Llama-guanaco supersayan apunto de DOMINAR EL MUNDO (notese la mirada aviesa)
Llama-guanaco supersayan apunto de DOMINAR EL MUNDO (notese la mirada aviesa)

¿Sabías que...


... el guano de guanaco se usa como combustible espacial y como un potente explosivo?

 

... USA nunca lanzó bombas atómicas sobre Japón, solo dos guanacas con la regla?

 

... la mascota de la Legión era un guanaco hasta que devoró a 42 legionarios y la cambiaron por la cabra?

 

... el guanaco siempre llama dos veces?

 

... este artículo contiene hasta datos reales?