Crítica: En tierra hostil (2009)

 

  Por Repolocho

Título original: The Hurt Locker

 

Dirección: Kathryn Bigelow

 

Guión: Mark Boal

 

Intérpretes: Jeremy Renner (William James, un adicto a la adrenalina), Anthony Mackie (el sargento J. T. Sanborn), Brian Geraghty (el especialista Owen Eldridge, un joven sufrido que tiene que acudir a terapia para no desmoronarse), Guy Pearce (el sargento Matt Thompson. ¡Ay, qué poco me ha durao el papel...!), Ralph Fiennes (el jefe de la unidad de contratistas militares que encuentran en mitad del desierto), David Morse (el coronel Reed, insoportablemente americano), Christian Camargo (el teniente coronel John Cambridge, sencillamente gilipollas), Evangeline Lilly (Connie James, la novia de William).

 

 

Crítica:

 

Aun a riesgo de morir aplastada por una lluvia de mamporrazos y golpes de remo de otros críticos más prestigiosos (aunque dudo que empleen su valioso tiempo en meterse en webs de esta calaña), he de decir que "En tierra hostil" no me gustó. No es que me haya parecido una mala película, ni quiera desahogarme con una crítica sangrante de esas en las que suelo meter el dedo en el ojo (o en la herida, que duele más...), no; simplemente me ha resultado decepcionante.

 

Es posible que acudiera al cine con las expectativas demasiado altas o que no supiese comprenderla del todo, pero el caso es que salí con una sensación de indiferencia y decepción que me hizo replantearme si de verdad se merecía el Oscar a Mejor Película. Definitivamente, no.

 

Si lo vemos desde otra perspectiva, las demás películas no es que fueran una maravilla (recordemos que la insultante "Avatar" iba en cabeza), por lo que dieron el premio, no a la menos mala, sino a la menos "floja". De todos modos, sigo pensando que hubiese sido mucho mejor que se llevase el Oscar "Malditos Bastardos". A lo mejor no se lo merecía, pero hubiese sido el desmadre absoluto, como ocurriera en la Gala de los Oscar del 2005, cuando un sorprendido Jack Nicholson abrió el sobre y, con los ojos más abiertos de lo habitual, pronunció el nombre del film ganador: "Crash". La gente dudó durante un segundo si aplaudir o no. Hubiese dado lo que fuera con tal de que se volviera a repetir, esta vez con la de Tarantino.

Aun así, tampoco es de extrañar el resultado de este año porque, si tenemos en cuenta la tensión Bigelow-Cameron que hubo en la gala, ya se tenía cierta idea de quién de los dos se iba a llevar el Oscar. Pero bueno, no son los premios los que hacen buena a una película (por mucho que quiera hacernos creer Jollivú).

 

Hablemos de "En tierra hostil". La acción se desarrolla en el Iraq que conocemos hoy en día (por desgracia) y los protagonistas esta vez son artificieros. Esto es lo que diferencia a la película de otras muchas que se han hecho sobre la guerra de Iraq en los últimos años: los protagonistas. Ya no se narran solamente las hazañas de un pelotón de jóvenes soldados que bla, bla, bla, sino que se ve el día a día de una unidad de artificieros que tienen que exponerse a la muerte aún más que el resto de sus compañeros.

 

El comienzo es espectacular y he de reconocer que me encantó: aparecen tres soldados, Sanborn, Eldridge y Thompson, que han recibido un aviso de bomba en una de las calles principales de Bagdad. Es este último quien debe ir a detonarla personalmente, ya que el robot falla a mitad de camino. Es entonces cuando se produce una de las explosiones más hermosas y cuidadosamente grabadas que he visto en el cine. Sé que sólo era el principio del film, pero es mi  escena favorita. Bigelow capta el más mínimo detalle de un momento que cualquier otro director hubiese solucionado de un modo rápido y efectista, con una mano maestra que muestra con una gran claridad el efecto implosión-explosión. Sin palabras.

 

Después del suceso llega el sargento William James en sustitución de Thompson, quien no termina de encajar (ni tampoco lo pretende) entre sus nuevos compañeros, ya que sus métodos son bastante "especiales", por así decirlo. Es un temerario, se arriesga demasiado y sin necesidad, poniendo en peligro las vidas del resto de su equipo. Hay un momento bastante tenso, que también me gustaría destacar, en el que el sargento Sanborn se plantea matarle. No será uno de los más significativos del film, pero a mí personalmente me pareció que plasmaba a la perfección la falta de moral a la que se puede llegar en un entorno de guerra en el que ya nada importa.

El resto de la película transcurre desactivando bombas, mostrando la vida en el campamento militar y las terapias a las que tiene que someterse Eldridge (otro punto bastante bueno también), misiones en el desierto (posiblemente, lo mejor de la peli con la explosión inicial), etc.

 

Tiene fallos importantes en el ritmo, llegando a la monotonía provocada por una innecesaria lentitud narrativa, y el efecto "documental" que quiere darle Bigelow al film con la cámara de mano llega a ser mareante. Una cosa es darle un toque indie y otra muy distinta es pasarse. Sin embargo, hay que reconocer que para ser una película sobre la guerra de Iraq, no redunda en ello, sino que se centra más en la tensión que tienen que sufrir los soldados americanos y los iraquíes a diario, sin ponerse de parte de los unos o de los otros, tan sólo mostrando la realidad lo más fielmente posible. Ese es el mérito de "En tierra hostil", que no es como otras superproducciones como "Regreso al infierno" o "Black Hawk derribado" (ya sé que esta no es en Iraq, pero me refiero al mensaje implícito) que muestran a los americanos como héroes; ésta está rodada con bajo presupuesto, es más modesta y se detiene más en los detalles, en los silencios, en la soledad, el miedo y la incomprensión. En esta película no hay héroes, sólo jóvenes asustados en medio de un lugar con gente que les odia, pero con razón. Bigelow no justifica sus acciones, nos las hace llegar. Nos intenta concienciar de lo que ocurre sin ser panfletaria.

 

Es un gran trabajo. Está cuidada al máximo. Pero sé que la olvidaré.

Escribir comentario

Comentarios: 2
  • #1

    HoJu (jueves, 29 abril 2010 17:49)

    This section needs more lol.

  • #2

    This is madnes vaya, vaya, baya del bosque (lunes, 03 mayo 2010 11:55)

    La película es buena, porque es efectiva. Consigue lo que se propone. Quiere mostrar a un cretino hijo de puta, para explicar porqué es un cretino hijo de puta y que así, el eXpectador vea que igual el cretino hijo de puta igual no es tan cretino hijo de puta, sino que, simplemente afronta su trabajo de una manera soportable, teniendo en cuenta que su trabajo no es fichar en una oficina de 8 a 3 con pausa para cafe y lectura del Marca, sino desactivar bombas (coches-bomba, cubos de basura-bomba, cadaveres-bomba, hombres bomba, niños bomba, incluso bombas-bomba).
    Otro de los aspectos destacables de la película es que, aunque es más larga que un día sin pan (dos horas y cuarto), se pasa en un na, aunque le sobra un poquito de "muerte matanza y desesperacion" entre los escombros nocturnos post-bomba, no porque sea una escena sangrienta, que tampoco lo es, sino porque es un rato de poca luz en el que tres soldados andan, eso es todo lo que hacen. Andar en la oscuridad.
    Un punto ligeramente "televisivo" pero muy valioso, son las subtramas de cada personaje ya que, aunque te hacen creer en un principio que la protagonista del flim o pinicula es la unidad (sargento, cabo y "artificiero") el prota es James, pero tanto su relación con el niño como la de Owen con el médico aportan valiosos detalles de personalidad y aristas a los personajes. Incluso un personaje terciario como el psicólogo tiene textura y personalidad.
    Por otra parte y reconociendo que la señora Bigelow rodó con 4 duros y no le dio el presupuesto para un "jodío" trípode, por lo menos podría haber contratado a un operador de cámara sin Parkinson. Lo que quiero decir es que, aunque el estilo "camara al hombro" le va muy bien a la peli, un soldado puede entrar en una habitación y mirar rápido a ambos lados, pero una cámara de cine no debe.
    Para terminar, y volviendo al argumento inicial, es una peli que consigue lo que quiere, explicar el porqué de un personaje y mantener una tensión increíble durante toda la película. Cuando Bigelow quiere que estés nervioso, te muerdes las uñas; cuando quiere que estés tenso, te clavas a la butaca; cuando quiere que te pongas tienno... te pones tienno etc.
    En definitiva 2,50 € de mi presupuesto cultural bien invertidos (¡Viva la filmoteca que nos da cine barato!).
    Buenas noches y buena Muerte.